Elaboración de un cubrecontador personalizado.
La vista del cuadro eléctrico en el recibidor no agrada a nadie, y mas si se trata de una caja gris que está en el sitio perfecto para colgar 2 cuadros que tenía desde hace tiempo y que me encantan.
La verdad es que, ni las láminas ni los marcos valen nada, pero los segundos son antiguos, de la familia de mi marido (y tenian otras láminas, que he colocado en otros marcos donde destacan mas) y a mi me encantan por su sencillez.
Había pensado hacer una pequeña estructura lisa y lo menos gruesa posible para que se camuflase en la pared y sobre ella colgar los 2 cuadritos.
Pero como soy rara y me encantan las superposiciones pensé que podía probar en éste sitio, y con un palet y sus maderitas empezó todo.
Lijar, pintar (con barniz y con pintura de color gris, muy diluida, para que se encrustase bien en la madera, y roja), cortar, pegar y clavar. Eso es lo que me llevé un montón de tiempo haciendo.
Después las pegué sobre un panel de okume finito para que se quedasen bien juntas y las dejé con peso encima durante una noche.
Y ese panel lo monté sobre una estructura de madera, del grosor suficiente para que el cuadro de la luz quedase detrás de ella una vez colocada, la cual hice con cuatro listones, cola y tornillos.
Una vez montada en la misma con cola blanca y puntillas sin cabeza, quedaba colocarle un marco exterior y colocarlo en su lugar (tapando ese horror de caja).
Ya tenía un marco sobre el que colgar mis 2 cuadritos y de camino tapar esa fealdad de cuadro eléctrico.
Estaba contenta, pero las tablitas en color rojo no lo hacían encajar del todo en la decoración del espacio, ya que aunque tiene toques de rojo predominan los naranjas y beige.
Por lo cual cambíe una vez puesto, pintándo encima de ellas, el color de varias de las tablas rojas y combiné los otros dos colores.
Ahora tengo un panel mas alegre y que combina mejor con los colores del resto del recibidor.
Espero que os guste, ya que en ésta ocasión me he arriesgado mas de lo que suelo hacer, pero no ha quedado nada mal, a mi parecer.
Un abrazo a todos los que sacáis un rato de vuestro tiempo para leerme y hasta pronto.